La carrera de los Gobiernos de medio mundo por subvencionar a los fabricantes de chips empezó hace un año y se ha ido concretando en diversos planes como los de la Unión Europea. Con la ley de chips se quiere atraer a productores, y el diseñador de chips más importante con fábricas propias es Intel. La compañía tiene planeada una inversión de 17 000 millones de dólares en una fábrica en Magdeburgo, de los cuales 6800 millones de euros serán proporcionados por Alemania.

Eso significa que cubrirá exactamente el 40 % de la inversión inicial de Intel en la ciudad capital del estado de Sajonia-Anhalt. La inversión será de 2700 M€ en los prespuestos de 2022, mientras que el resto irán al presupuesto federal de 2023 y 2024. Esta fábrica empezará a levantarse en 2023, pero no entraría en funcionamiento hasta 2027 con los procesos litográficos más punteros de 2 nm y 1.8 nm (20 Å y 18 Å).

Por otro lado, TSMC rechaza de momento levantar una fábrica en Europa, según ha indicado su presidente del consejo de administración, Mark Liu. Alega que los clientes europeos de la compañía son pocos, aunque indica que por el momento no hay planes concretos de expansión en el continente. O sea, lo mismo que lleva diciendo años cuando se le pregunta por el tema. Sin embargo, está realizando una fuerte expansión en Asia y América, que en este último continente es donde están sus principales clientes como AMD, NVIDIA y Apple.

Vía: TechPowerUp.