Intel ha mostrado en alguna que otra ocasión los nuevos sistemas de refrigeración para centros de datos con los que estaba experimentando. El más chochante es el de la refrigeración por inmersión en fluido/líquido o simplemente refrigeración por inmersión, que es mejor decirlo así que «refrigeración líquida por inmersión» porque es una definición procedente de webs anglosajonas que es totalmente errónea y se está dejando tal cual en las traducciones literales de las seudowebs de seudotecnología en seudoespañol/spanglish. La última inversión de Intel son 700 millones de dólares en un centro de investigación orientado a la refrigeración por inmersión.

Hay infinidad de empresas invirtiendo en este tipo de refrigeración porque tiene ventajas relacionadas con los costes de operación. Por ejemplo, se precisa de mucha menos energía para la refrigeración que con refrigeración por aire, además de que seguro que los empleados de estos centros de datos agradecerán la reducción del ruido. Algunas compañías hablan de que se puede reducir en torno a un 95 % el uso de energía en la refrigeración de los equipos de los centros de datos, pero eso requiere que se estandaricen los sistemas.

Es la idea de Intel detrás de esa inversión de 700 M$. Quiere levantar un centro de investigación en Hillsboro (Oregón), con la idea de inaugurarlo a finales de 2023. Se precisará del desarrollo de tecnologías relacionadas con el calentamiento, enfriamiento y reutilización del agua. Además, Intel creará un estándar abierto para el diseño de las unidades para la refrigeración por inmersión por lo que cualquier centro de datos se podrá beneficiar de lo desarrollado por la compañía.

Intel dice que en torno al 1 % del consumo mundial de energía la realizan los centros de datos, aunque algunos estudios apuntan más bien hacia el 1.5 %, que es una barbaridad. Con lo investigado por Intel se pretende reducir las emisiones de carbono en un 45 % en el terreno de la reutilización de la energía en estas instalaciones, teniendo en cuenta que el 35-40 % del consumo procede de la refrigeración de los equipos. El agua caliente se podría reutilizar para calentar edificios, como hogares o empresas cercanas.

Vía: Tom's Hardware.