La memoria flash es la usada para almacenamiento junto a los sistemas en chips que incluyen teléfonos, tabletas y otros dispositivos similares, y normalmente va apilada con el procesador por un tema de espacio. Kioxia ha indicado que ya ha enviado muestras a sus clientes de la nueva memoria de almacenamiento flash universal (UFS) basada en la versión 3.1 con la que reduce el espacio que ocupa y el grosor del chip, facilitando adelgazar los dispositivos.

Estos nuevos chips de memoria UFS 3.1 tienen unas capacidad de 256 GB y 512 GB, por lo que puede orientarse también a tabletas y portátiles tipo Chromebook así como a móviles de gama alta. La velocidad de esta generación de memoria flash también aumenta, y Kioxia habla de un 30 % más de velocidad de lectura aleatoria y de un 40 % más de escritura aleatoria. Adicionalmente usa un sistema mejorado de rendimiento del equipo anfitrión (HPB 2.0) que usa su RAM para almacenar las tablas de traducción física. Esta versión va más allá del acceso a 4 KB de fragmentos de datos lo que mejora aún más el rendimiento en lectura aleatoria.

Kioxia hace una mención a que, si se combinan los pedidos de memoria UFS y eMMC, el 70 % es de la UFS y que ese porcentaje seguirá en aumento en detrimento de la eMMC. Aleluya. La eMMC irá quedando relegada a los móviles más baratos y otros sistemas empotrados en los que la velocidad no sea tan importante como el coste. Actualmente la mayoría de móviles de gama media son presentados con UFS bajo el capó.

Vía: TechPowerUp.