ARCTIC ha expandido su línea de pastas térmicas con la MX-5, que se venderá en tubos de 2 g a 50 g. Como otras pastas térmicas no hace uso de metales en su composición por lo que es de uso seguro para los equipos al no conducir la electricidad. Está asegurada para un uso de hasta ocho años si es debidamente almacenada.

Emplea micropartículas de carbono para facilitar la inserción de la pasta en imperfecciones en la base de los disipadores o de la tapa del procesador. Su resistividad es de 1.9×1013 Ωcm con una rigidez dieléctrica de 250 voltios por milésima (V/mil).

El PVPR varía según la cantidad del tubo:

  • 2 g, 7.49 euros
  • 4 g, 9.49 euros
  • 8 g, 12.49 euros
  • 20 g, 21.99 euros
  • 50 g, 36.99 euros

Hay algunas versiones que se venden con una espátula de aplicación que añade 1.5 euros al precio. La MX-4 es de las mejores pastas térmicas del mercado, también por precio, y si la MX-5 mejora —que es de imaginar que sí— puede merecer la pena el ligero aumento de precio que tiene —los 4 g de MX-4 tienen un PVPR de 8.99 euros, aunque su PVP se sitúe más sobre los 8 euros—.