En breve se van a anunciar nuevos procesadores Ryzen y en ese momento la mirada se volverá de nuevo a Intel para saber si podrá competir adecuadamente con AMD. Los actuales procesadores Core de 10.ª generación de sobremesa son los que en general aprovechan mejor esas inalcanzables RTX 30, y si los Ryzen 5000 las aprovechan bastante mejor que los Ryzen 3000 entonces Intel tendrá un pequeño problema. Nada que no solucione un lanzamiento rápido de nuevos procesadores, y serán los Rocket Lake S.

Desde Videocardz aseguran ahora que llegarán en marzo, en la décima semana de 2021, aunque rumores previos apuntaban a una presentación en el CES 2021 de principios de año. Ambas cosas no son excluyentes, por lo que podrían ser anunciadas en el CES y puestos a la venta en marzo. Esos procesadores serían los de sobremesa de la 11.ª generación Core, pero lo que queda más o menos claro es que va a tratarse de una renovación rápida.

Preveo más bien que se centrará en los procesadores de sufijo K, los de alto rendimiento para overclocking, por lo que no creo que se trate de una renovación completa de su catálogo. Además desde Videocardz apuntan a una posible llegada en el segundo semestre de 2021 de los procesadores Alder Lake S que serían la 12.ª generación Core, y estos incluirían PCIe 5.0 y DDR5. Personalmente me parece muy ajustado que la DDR5 llegue al sector consumo antes de 2022, pero quién sabe, todo son rumores y que cada uno crea lo que quiera; el tiempo dirá.

Los procesadores Rocket Lake S llegarán acompañados de la serie de chipsets serie 500, o más específicamente se habla por ahora de solo el Z590. Una novedad de estos Rocket Lake S será la inclusión de PCIe 4.0, que se activará de manera retroactiva en ciertas placas base serie 400 si disponen de los componentes adecuados para manejar esas frecuencias de funcionamiento. Estos procesadores estarán fabricados (todavía) a 14 nm, pero incluirían mejoras en el núcleo Cypress Cove que usarían traídas de los Golden Cove de los Alder Lake S por lo que proporcionarían una sustancial mejora en la potencia por núcleo. Quizás la suficiente para aprovechar mejor la RTX 3080, que por ahora hay problemas para exprimirla en ciertos juegos a FHD en monitores incluso de 144 Hz.

Vía: Videocardz.