Samsung lleva tiempo proponiendo el uso de sus Galaxy S como PC de sobremesa gracias al uso de la base Dex, y es lo que también propone con la tableta Galaxy Tab S4. Esta tableta es una versión renovada de la Galaxy Tab S3, si bien no incluye el mejor procesador de este año sino del año pasado, un Snapdragon 835. Algo relativamente lógico teniendo en cuenta que el terreno de las tabletas es uno que ha perdido fuelle en los últimos años y se está contrayendo. Aun así, el procesador es bastante bueno para las tareas para las que se usan generalmente las tabletas.

El diseño externo está hecho de aluminio y es bastante estándar, aunque hace un buen aprovechamiento el frontal, incluyendo una pantalla de 10.5 pulgadas de tipo Super-AMOLED con una resolución de 2560 × 1600 píxeles. Es una resolución más apta para usar la tableta para trabajar que la más habitual 16:9 para consumo de contenido multimedia.

Tabletas de Samsung
Galaxy Tab S4 Galaxy Tab S3
Compañía Samsung Samsung
Pantalla 10.5" 9.7"
Resolución 2560 × 1600 px 2048 × 1536 px
Procesador Snapdragon 835 Snapdragon 820
Memoria 4 GB 4 GB
Almacenamiento 64 GB 32 GB
Batería 7300 mAh 6000 mAh
Cámaras (tr./fr.) 13|#| Mpx/8 Mpx 13|#| Mpx/5 Mpx
Tamaño 164.3 × 249.3 × 7.1 mm 169.0 × 237.3 × 6.0 mm
Peso 482 g 434 g
SO Android 8.1 Android 7.0
Extras micro-SD,
USB tipo C
micro-SD,
lector de huellas,
USB tipo C
Precio 300  EUR

La tableta incluye 4 GB de RAM y 64 o 256 GB de almacenamiento, con lector de tarjetas micro-SD de hasta 400 GB. Dispone de un conector USB tipo C para datos y cargar su batería de 7300 mAh, indicándose que tiene carga acelerada y no carga rápida, por lo que no me queda muy claro de cuántos vatios es esa carga acelerada. La autonomía de la batería está estimada en unas dieciséis horas de reproducción de vídeo. También tiene una cámara trasera de 13 Mpx y frontal de 8 Mpx, si bien Samsung no se ha parado a hablar de ellas, por lo que serán funcionales y poco más. Incluye lector de huellas dactilares, y un escáner de iris.

Como he indicado antes, la resolución está más orientada a trabajar y es al público al que orienta Samsung esta tableta. Combinándola con una funda-teclado y un lápiz digital S Pen, se puede conseguir «hacer más estés donde estés». También es la primera tableta de la compañía en ser compatible con la base DeX, que permite conectarla a un televisor, teclado y ratón y usar la interfaz adaptada de escritorio que Samsung ya incluye en los Galaxy S8 y S9, por ejemplo. Todo gracias al conector USB tipo C, compatible con carga, datos y DisplayPort 1.2.

La versión wifi de la tableta estará disponible el 10 de agosto por 649 dólares, y la versión LTE lo estará más adelante, si bien no ha indicado su precio. La funda-teclado costará 149 dólares.