ASRock se ha introducido en el mercado de las tarjetas gráficas con la introducción de tarjetas gráficas de la serie RX 500. De esta forma, la compañía se ha convertido en un ensamblador exclusivo de los chips gráficos de AMD, accediendo a los descuentos habituales por ello. Hace unos días surgieron diversos titulares diciendo que AMD había vetado a ASRock la venta de ellas en Europa en base a un comentario de un empleado que quizás no eligió la mejor forma de expresarse.
ASRock ha indicado que ha optado por vender sus productos de momento en América y Asia, excluyendo a China, Hong Kong y Taiwán. Estarán disponibles en el mercado estadounidense, México, Canadá, Japón, Rusia, Corea del Sur y Australia como mercados más importantes. Según ASRock, la elección de países se ha realizado en la historia previa de acuerdos para canales de venta entre ambas compañías, o dicho de otro modo, en conseguir los mejores precios en las GPU de AMD para sus tarjetas gráficas y reducir los costes de distribución —lo cual tiene lógica siendo nuevo en las tarjetas gráficas—.
Las restricciones de venta regional es habitual en el sector, y hay multitud de ensambladores chinos que nadie en Europa conoce ya que están limitados a aquel país. También hay otros más conocidos como PowerColor, de Taiwán, cuyas ventas las concentra en su país de origen, América y un puñado de países europeos. AMD o Nvidia no imponen restricciones de ventas para diversas regiones, pero sí que en función de dónde se quieran vender las tarjetas gráficas imponen unos precios u otros a sus chips gráficos.
Vía: Guru3D, Tom's Hardware.
