Las máquinas de venta automática están por todas partes. En ellas se pueden adquirir productos de parafarmacia, refrescos, sandwiches o, incluso, juguetes para adultos. Pero hay quien ha pensado que puede ser una buena forma de vender coches, y no precisamente de los de juguete.

La compañía Carvana anunció hace pocos años poner en marcha una máquina de venta como forma de diferenciarse de la competencia en su concesionario de Nashville. La idea no ha tardado en ser reproducida por el fabricante estadounidense Ford, quien se ha asociado con Alibaba, aunque con una pequeña diferencia. En vez de ser comprados directamente, los usuarios eligen en la máquina expendedora un coche para probarlo.

La máquina, que se encuentra en Guangzhou, dentro del Super Test-Drive Center de la ciudad, tiene una capacidad de 42 vehículos y contiene 10 modelos distintos de la compañía Ford, que incluyen el Mondeo, el Mustang y el Explorer. A cambio de las tasas necesarias, que se pagan con la aplicación Tmall de Alibaba, y de hacerse una autofoto, el cliente puede probar el vehículo durante tres días antes de tener que devolverlo.

Esta posibilidad de probar un vehículo, tras elegirlo en una máquina expendedora, solo estará disponible hasta el 23 de abril.

Vía: EnGadget.