La empresa china Vivo ha presentado dos nuevos teléfonos que están fuertemente orientados a los que gustan las autofotos, aunque en esencia son el mismo dispositivo. El X9 incluye una pantalla Super AMOLED de 5.5 pulgadas con resolución 1920 x 1080 píxeles, con un procesador Snapdragon 625 de ocho núcleos Cortex-A53 a 2 GHz y GPU Adreno 506, acompañado de 4 GB de RAM y 64 GB de almacenamiento.

La versión internacional cuenta con 128 GB de almacenamiento y compatibilidad con las bandas LTE más usadas en occidente. Son de doble SIM, con una batería de 3050 mAh de carga acelerada, con Bluetooth 4.2, wifi 802.11 ac y un lector de huellas dactilares en el botón de inicio frontal.

La cámara en esta posición es de 20 megapíxeles con sensor Sony IMX376 de 1/2.8'' y apertura f/2.0, acompañada de una cámara secundaria monocroma de 8 megapíxeles para capturar información de profundidad. La cámara trasera es de 16 megapíxeles, con mismo sensor y óptica, pero a la que no han prestado tanta atención que a la frontal.

El modelo X9 Plus incluye en prácticamente el mismo tamaño una pantalla de 5.88 pulgadas de mismo tipo y resolución, pero cambia a un procesador Snapdragon 653 de cuatro núcleos Cortex-A72 a 1.95 GHz y otros cuatro Cortex-A53 a 1.44 GHz con GPU ADreno 510. Incluye 6 GB de RAM, y estará disponible en modelo de 64 y 128 GB de almacenamiento. Cuenta con un sonido mejorado con los DAC ES9018 y ES9603, una batería de 4000 mAh. Llegan con Funtouch OS 3.0, basado en Android 6.0.1.

Estarán disponibles en rosa y oro. El precio del X9 de 64 GB es de 2798 yuanes (unos 380 euros al cambio directo, o más hacia los 500 € con impuestos y tasas de importación) y 2998 yuanes el modelo de 128 GB, mientras que el del X9 Plus lo anunciará el 26 de diciembre, momento en el que se pondrá a la venta.