Dentro del microevento que tuvo lugar para introducir los primeros detalles oficiales de sus próximos procesadores, AMD también mostró varias de las placas y equipos que está preparando para Zen. La que estaba en escaparte era una de las placas base para servidores, para el proceso de 32 núcleos físicos o 64 núcleos lógicos llamado en clave Naples (Nápoles).

Esta placa base para dos de estos procesadores incluye 16 ranuras de memoria DDR4 en modo de cuatro canales, aunque podría tratarse de un diseño de memoria de ocho canales. Está alimentada por un conector EPS y otro posiblemente PCIe de seis pines, con un tamaño del zócalo para los procesadores de 74,6 x 118,7 mm. Posee ocho puertos SATA, conectores Ethernet, y USB 3.0.

Tiene cuatro ranuras PCIe para funcionar a x16 cada una, que apuntan a que cada procesador Naples podría manejar 32 pistas PCIe. Lo que destacan en Anandtech es la ausencia de un chipset en la placa base, por lo que podrían haberlo movido directamente al procesador o que sea uno de los chips FPGA que hay en la placa.

AMD no ha dado casi detalles de las placas base AM4, aunque van a llegar con la conectividad habitual en 2016, como conector USB tipo C, así como conectores de vídeo (para las APU, puesto que AM4 será el único zócalo para los procesadores caseros). Pero a primera vista no está claro dónde residirá el chipset, puesto que en la inspección visual no se ha visto ningún chip similar. Las placas mostradas funcionan con DDR4-2400, y los procesadores hacen uso de los nuevos disipadores de la compañía, tanto el silencioso que disipa 95 W, como el Wraith de 125 W.

Vía: Ars Technica.