Donald Trump no para de generar titulares por sus declaraciones, que van de lo surrealista a lo polémico. Una de sus últimas declaraciones en su campaña para hacerse con la nominación del Partido Republicano ha sido afirmar que, en caso de ser elegido, haría que Apple fabricase sus productos en Estados Unidos.

Esta afirmación gustará mucho a un buen número de sus votantes, aunque realmente es algo que es difícil que pueda llegar a suceder. No hay ninguna ley que impida a las empresas estadounidenses llevarse la producción fuera de sus fronteras y, de existir, sería inútil a menos que se castigase con dureza a los infractores. Además, la mano de obra es más barata fuera de sus fronteras, lo que ayuda a reducir los costes de producción.

El único producto que Apple ensambla en EE. UU. es el Mac Pro, lo cual se realiza en una fábrica de Austin, Texas. El motivo de que Apple lo pueda hacer es que es un proceso en el que intervienen robots en la mayor parte del proceso y que no es un producto que se venda a gran escala.

Los críticos de Trump dirán que con estas declaraciones el millonario no entiende la industria tecnológica ni el de los negocios. No obstante, el millonario tiene la facultad de crear polémica y que se hable de él. Además, sólo dice lo que sus posibles votantes quieren oir, aunque no pueda mantener sus promesas.

Vía: Apple Insider.