YouTube es el sitio de streaming de vídeo más popular (al menos en principio), pero aun así sigue sin ser rentable para Google. Al menos esto es lo que afirman desde The Wall Street Journal, que tras 9 años desde su compra por 1.650 millones de dólares en 2006 sigue sin encontrar el modelo de negocio adecuado para rentabilizar la inversión.

El problema según WSJ es que la mayoría de los usuarios ven los vídeos directamente en las webs en que se incrustan en lugar de ir a YouTube en donde sí que tienen anuncios y resultan visitas más beneficiosas para la compañía. Además, estiman que el 9% de los espectadores de estos vídeos generan el 85% de las visitas a vídeos, por lo que YouTube tampoco tendría una amplia base de usuarios. Los costes para la compañía están relacionados de manera casi total con la adquisición de tráfico para poder prestar el servicio de manera adecuada.

Servicios como Music Key o el de pago para eliminar los anuncios de los vídeos de YouTube serían la forma de Google se salvar la situación económica de su filial. También explicaría la mano dura que está manteniendo YouTube con los artistas que no quieren unirse al nuevo servicio de streaming de la compañía.

Vía: EnGadget.