El 10 de julio de 2008, hace seis años, Apple abría las puesta de su tienda virtual App Store. El objetivo era llevar a los usuarios del primer iPhone una tienda digital en la que pudiera controlar la calidad de las aplicaciones. Un día después sería presentado el iPhone 3G con iOS 2.0.1. Tras seis largos años en el que ha ocurrido de todo (resumen: Android, demandas y el hundimiento de BlackBerry), vamos a ver cómo está la situación en la tienda.
Por un lado tenemos la cifra (no oficial) de 1.252.777 aplicaciones disponibles en la App Store. A lo largo de su historia han pasado 1.601.413, incluyendo las retiradas por diversos motivos, desde legales hasta que el desarrollador la haya abandonado. Las categorías en las que más abandonos ha habido son Libros (27%), Entretenimiento (25%) y Utilidades (25%).
Además se espera que de aquí a enero de 2016 haya más de 950.000 nuevas aplicaciones. El número de desarrolladores inscritos es de algo así como 9 millones, un aumento del 47% con respecto al año pasado. Se descargan 800 aplicaciones por segundo y hasta la fecha se han realizado 75.000 millones de descargas.
Las aplicaciones zombis (aquellas que no consiguen captar prácticamente la atención de los usuarios) son el 79,6%, un aumento de 2,6 puntos desde mayo de este año, o de 9,2 puntos porcentuales desde junio de 2013. Más aplicaciones no es sinónimo de mayor calidad, si no de más dificultad para llamar la atención de los usuarios que siempre recurren a las mismas (que son las que más se promocionan).
Vía: TechCrunch.
