Parece mentira que en la mayoría de los trabajos de programación se hayan quedado en el pasado y sólo usen Eclipse o NetBeans para realizar los desarrollos. Pero siendo sinceros, son bastante castaña en cuanto a rendimiento.

Una opción actualizada es la del programa Sublime Text 2, que aunque no es un entorno de desarrollo (IDE), si tenemos el terminal abierto en todo momento nos sirve perfectamente. De hecho yo no dejaría a nadie programar en algo que no fuera un Linux o Unix. Es multiplataforma (Windows, Mac, Linux) y gratuito. Bueno, la versión de prueba no expira, pero si no pagáis por él, os seguirá saltando de vez en cuando (una vez cada pocas horas de uso) una pantalla diciendoos que lo compráis.

Quizás sea de los más utilizados en el entorno profesional Web fuera de nuestras fronteras, que ya sabemos que en España siempre vamos diez años por detrás. Tanto, que en mi último trabajo todavía utilizan PHP 4 (por lo menos era la versión más reciente).Pero veamos qué nos ofrece este programa, y por lo que es tan querido.

La principal razón, porque es rápido, muy rápido. Jamás se te quedará bloqueado haciendo algo, o tardará mucho en arrancar. Y otra característica, sobre todo la que llama más la atención, es que pulsando ⌘P (lo siento, soy de Mac) se nos abrirá una ventana en la que abrir archivos por su nombre, o añandiendo @,# ó :, buscar por número de línea, en el contenido de los archivos o símbolos. Y todo instantáneamente. Al abrir un documento, veremos en el lateral derecho una pequeña columna en el que nos mostrará todas las líenes de código, con colores. Muy práctico para ir directamente a un punto concreto del archivo.

La segunda opción que tiene es que permite la selección múltiple. Es decir, elegimos un texto, y cada vez que le demos a ⌘D nos elegirá la siguiente coincidencia, y si nos ponemos a escribir, modificaremos todas las que tengamos elegidas. Es un cursor múltiple que muchas veces viene más que bien. Además permite el reemplazo en texto usando expresiones regulares, así que ese apartado lo tiene bien cubierto.

También tiene la posibilidad de dividir en una o más zonas la pantalla de trabajo, y la capacidad de personalizar absolutamente cualquier cosa del programa: atajos, menús, etc. Utiliza JSON para guardar las configuraciones, pero cualquiera que hagamos la tendremos que hacer en el JSON de nuestro usuario y no en el general, o cuando actualicemos el programa los perderemos.

Por último, lo más potente que tiene es el sistema de plugins. Hay gestores en Internet que nos permiten instalar desde repositorios esos plugins, y que hace que no tenga nada que envidiarle a Eclipse o NetBeans. Y si tenemos en cuenta que tiene una gran comunidad de usuarios y desarrolladores apoyándole, tenemos un entorno de programación adaptable con el que no necesitaremos nada más para realizar nuestros desarrollos de software.

Para hacernos una idea de lo que ofrece la comunidad, nada mejor que instalarnos Sublime Package Control, un gestor de paquetes para la aplicación. La instalación se hace simplemente abriendo la consola que tiene el programa (indican el atajo en la página, además del código que tendremos que copiar en ella). A partir de ese momento, si pulsamos "shift ⌘ P" y escribimos "install package", podremos visualizar todos los que contiene el repositorio.

Los paquetes son de todo tipo, desde un caza URLs para bajarnos rápidamente la última versión de una librería, hasta un plugin para formatear el código de java como se hace en Eclipse. El sistema de plugins, y de estos repositorios en concreto, es increíblemente potente.

En definitiva, Sublime Text 2 es una aplicación que debería ser probada por cualquier programador ya que verá como su productividad aumenta muchos enteros. Y lo que os he comentado en este artículo son sólo unas pocas de sus funcionalidades. Todas las demás las tendréis que ir descubriendo poco a poco.

Puntuación

9.0

sobre 10