Casi todas las compañías importantes dedicadas a la tecnología quieren un pedazo del pujante sector del vídeo bajo demanda. Con un público que cada vez se está acostumbrando más a ver contenidos televisivos y cinematográficos cuando quieren, con poca o ninguna publicidad, los ingresos que ofrecen de cara a los próximos años son muy atractivos.

Disney, uno de los gigantes audiovisuales del mundo, especialmente tras el acuerdo para hacerse con buena parte de 21st Century Fox. Su catálogo de contenidos es tan amplio, y atractivo para el público, que la compañía decidió dar el paso de montar su propio servicio de vídeo bajo demanda, el cual llegará en no mucho tiempo. La compañía de Bob Iger ha anunciado que este llegará en 2019.

Entre los contenidos que habrá en la plataforma se podrán encontrar clásicos del estudio, así como series de nueva creación, como la que Jon Favreau (Iron Man), está desarrollando. Una vez despejada la incógnita del año en el que pretenden lanzar el servicio, queda ver cuál podría ser el coste que tendría para los suscriptores. El nombre que han dado al servicio es el de Disney Plus.

Según se indica, la compañía pondría para este servicio un precio inferior al que suele cobrar Netflix, que va de los 8 a 14 dólares en EE. UU. (de 8 a 17 euros en España). Como ha reconocido Bob Iger, el menor precio reconoce que no tendrá tanto contenido como su competidor. De ser así, en base a los cálculos de un analista, Todd Juenger de la compañía Bernstein Research, Disney necesitaría 40 millones de abonados, a razón de 6 dólares cada uno, para cubrir los costes, incluyendo el de los contenidos, procesamiento de pagos y publicidad, entre otros.

Vía: Comic Book Resources.