Reconozcámoslo, los chistes de caca, culo, pedo, pis hace gracia tengas 5, 25 o 55 años, la prueba de ello es el éxito de series como Padre de familia, Los Simpsons (aunque en menor medida) y la serie que nos atañe en este artículo, South Park. Dudo que haya un día en el que los creadores, Trey Parker y Matt Stone, a los que podemos ver actuar en una de mis comedias favoritas: BASEketball, no se levanten sin recibir una carta de queja por alguno de sus episodios. Pues todo esto amigos, y mucho más, lo podremos ver en South Park: La vara de la verdad.

Si tuviera que explicar este juego en pocas palabras diría algo así: es como una película de South Park, pero subiendo de nivel. Así que para evitaros perder el tiempo leyendo este artículo, os diré: si no os gusta South Park, cerrad esta página e id a jugar con vuestras muñecas, pero si os gusta… habéis dado con el paraíso.

Vamos a empezar con lo bueno de este juego: su ambientación. Al principio del juego, tomaremos el control de un niño nuevo que ha llegado a South Park y que deberá, como todo niño nuevo, hacer amigos. Pero pronto se verá envuelto en una guerra entre humanos y elfos por el control del artefacto más poderoso del universo, la vara de la verdad. Sin embargo, nada más lejos de la realidad, ya que en el fondo lo que estaremos viviendo será una partida de rol en vivo protagonizada por todos los niños de South Park que por cierto, todos se tomarán muy en serio, aunque de vez en cuando alguien siempre termina gritando “¡eso no vale, estás haciendo trampas!”; y todo esto aderezado con muchas pinceladas de absurdez a las que nos tiene acostumbrados la serie y un guión que se irá complicando y dándonos una sorpresa tras otra.

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Nada más empezar a jugar, nos meteremos de lleno en la dinámica del juego, pocos tutoriales encontraremos, y los que encontremos son necesarios a mi parecer, así que desde el principio seremos libres de explorar prácticamente todo el mapeado de South Park, algo fundamental ya que será el principal pilar del juego. Visitar lugares, hablar con todo el mundo, hacer amigos, descubrir secretos… es sin duda lo más interesante de este juego, ya que veremos un South Park reflejado exactamente como lo conocemos en la serie. Prácticamente todos los personajes y elementos que encontremos en el mapa serán interactivos, y para añadir algún aliciente más a la exploración, deberemos recordar puntos del mapa a los que podremos acceder según vayamos ganando habilidades, abriendo de esta manera los límites del mapa. Como mención especial quiero recordar el mapa de Canadá, que haya las delicias de los jugones más clásicos.

El segundo pilar del juego serán las batallas. Con una ambientación “pseudo medieval” las peleas no podrían ser de otra manera que por turnos, a las que han incluido quick time events para potenciar nuestros ataques y reducir los de los enemigos, como forma de añadir un poco de sal a las batallas. Podremos además, empezar provocando cambios de estado en los enemigos, si al verlos por el mapa les atacamos antes de entrar en batalla, lo que nos dará una clara ventaja. Objetos invocaciones, cambios de estado (bastante graciosos por cierto)... las batallas cuentan con suficientes elementos para ser interesantes, sin agobiar con complejidad. Y por supuesto, en estas veremos el sello South Park, al incluir ataques, invocaciones o magias hilarantes y con guiños y cameos de personajes de la serie, y muchos escenarios extravagantes como el que veremos cuando peleemos con los Gnomos roba calzoncillos, memorable.

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Todo perfecto entonces, parece que tenemos el GOTY del año ¿no? Siento deciros que no, ahora vamos con la parte mala.

South Park es un juego que solo gustará a los fans de la serie, ya que, al no querer complicar demasiado el juego, o quizás es porque se hayan centrado demasiado en darle esa perfecta ambientación, el juego es MUY simple, demasiado diría yo. La exploración se termina haciendo repetitiva y lo único que te empuja a seguir con ella es el descubrir nuevos guiños. Las batallas son extremadamente fáciles, de hecho solo he tenido dificultades en una de ellas y era opcional, los compañeros, quitando a uno que por lo que he leído, es el que ha usado todo el mundo, son bastante inútiles y no te dan alicientes para jugar con ellos ¿dónde está ese buen hacer rolero que Obsidian ha demostrado con otros juegos como KOTOR II o Neverwinter? el rol en este juego se ha quedado un poco descafeinado. A mitad de partida tendremos dinero suficiente para vaciar todas las tiendas, y aunque la duración me ha parecido adecuada, he echado de menos más misiones secundarias a las que solemos estar acostumbrados en un buen juego de rol.

Todos estos puntos negativos son fácilmente aguantables, como me ha pasado a mi, si habéis disfrutado de los episodios, ya que se os olvidarán cuando veáis el disfraz de AWESOM-O o le pateeis el culo a Al Gore, pero si cogéis este juego por sus mecánicas, mucho me temo que os terminará defraudando. Es curioso cómo funciona el fan service, ¿verdad?

Así que una vez más, si sois fans de South Park, DEBÉIS comprar este juego, será vestro GOTY indiscutible. Si aún no lo sois, echadle un ojo a la serie y después al juego, merecerá la pena. Y si no os gusta la serie, que os visite el Señor Mojón.