Samsung ha presentado el Galaxy S25 FE como una alternativa de precio solo un poco más bajo dentro de la gama alta. El dispositivo mide 161.3 mm × 76.6 mm × 7.4 mm y pesa 190 g. Incluye una pantalla AMOLED de 6.7 in (17 cm) con una resolución de 2340 × 1080 píxeles, un refresco de 120 Hz, brillo máximo de 1900 nits reproduciendo HDR, y está protegida por Gorilla Glass Victus+. Tiene certificación IP68 y altavoces estéreo.
Incorpora el procesador Exynos 2400 de Samsung, acompañado de 8 GB de RAM y con opciones de almacenamiento de 128 GB, 256 GB o 512 GB. La batería es de 4900 mAh con carga rápida de 45 W, e inalámbrica de 25 W. Incluye 5G, Wi‑Fi 6E, Bluetooth 5.4 y NFC. Sale de fábrica con Android 16 bajo One UI 8, y Samsung promete siete años de actualizaciones del sistema operativo.
La cámara trasera es de 50 Mpx y ƒ/1.8 con OIS, con una de ultra gran angular de 12 Mpx y ƒ/2.2, y una de teleobjetivo de 8 Mpx con zum óptico de tres aumentos y OIS. Puede grabar vídeo en 8K con la cámara trasera. La cámara frontal es de 12 Mpx y ƒ/2.2.
Su precio parte de los 749 euros.