Spotify fue el servicio de música bajo demanda que redefinió el sector, aunque no fuera el primero en llegar. Pero eso fue en la década de los 2000, y ya bien entrados en los 2020 el panorama no le es tan favorecedor. No lo es desde que llegó en 2015 la versión de Apple que fue un nuevo revulsivo para el sector. La negociación con las discográficas se le puso cuesta arriba, y sigue siendo una compañía que pierde dinero. No le ha quedado otra a su director ejecutivo que anunciar el despido del 17 % de la plantilla a nivel mundial.

Teniendo unos 9000 empleados en todo el mundo, eso significa que despedirá a unos 1500 trabajadores. No se va a salvar nadie de los despidos, ni siquiera los empleados valiosos, porque se harán en función de lo que se le viene encima a la compañía en el futuro cercano. Daniel Ek ha reconocido que «esto afectará a individuos que han hecho contribuciones valiosas», por no decir que echarán a los que más cobran. «La inversión de los últimos tiempos ha hecho que seamos más productivos pero menos eficientes. Tenemos que ser ambas cosas a la vez».

«He decidido que una decisión de gran calado es la mejor opción para cumplir con nuestros objetivos» de reducir los costes operativos de la compañía, para alcanzar los objetivos financieros. La compañía declara pérdidas trimestrales con frecuencias, por lo que el problema de la compañía sigue siendo el mismo desde que se fundó en 2006: no consigue tener más ingresos que gastos de manera continua para mantenerse a flote sin ayuda de inversores.

Vía: Ars Technica.