El cambio a procesadores propios está haciendo que Apple renueve sus Mac más rápido que antes. Es una cuestión del rendimiento extra que pueda exprimir de un año a otro cambiando de litografía manteniendo costes similares. Pero también está añadiendo más núcleos y mayor frecuencia de funcionamiento a sus procesadores, que es lo que debería hacer con el M3 Max que aparentemente está ya probando según Bloomberg para sus próximos Mac.

La serie M2 vino a ser una serie inesperada debido al retraso en la producción de TSMC a 3 nm, por lo que ahora no se esperan grandes cambios de configuración de núcleos. Al menos el M3 se centraría en reducir consumir y aumentar frecuencias de CPU e iGPU junto a algunos cambios de microarquitectura para ganar un 15-20 % más de rendimiento.

En cuanto al M3 Max, sí que tendría más núcleos de CPU, pasando de los doce a los dieciséis. Serían todo núcleos de alto rendimiento, lo cual aportaría al menos un 30 % más de rendimiento sin contar mejora de frecuencias o de microarquitectura. Si eso fuera cierto, se podría esperar al menos un 40 % más de rendimiento en la CPU del M3 Max.

Cambiando al apartado de la GPU, aquí habría solo un par de núcleos adicionales, pasando de 38 a 40, lo cual no parece tan relevante. Una mejora de microarquitectura y frecuencias podría llevar la mejora de la GPU a un 15 % más de rendimiento, aunque si mejora la memoria LPDDR5 integrada en el encapsulado del procesador, por ejemplo usando de 8.5 GHz, que lleva tiempo en producción, o la de 10 GHz que está para producir en masa, le daría un empujón adicional de rendimiento.

Vía: Ars Technica.