Si os habíais preguntado por qué Afterburner lleva tiempo sin reconocer adecuadamente las nuevas tarjetas gráficas el motivo es que el proyecto está parado de manera indefinida. MSI ha dejado de colaborar con el desarrollador ruso del proyecto debido a las sanciones de Occidente, por lo que desde hace once meses el desarrollador no ha podido mejorar la utilidad. Él afirma que ha hecho su parte, pero MSI ha puesto en suspenso hacer la suya.

Es una herramienta que funciona bien para subir frecuencias de tarjetas gráficas de NVIDIA, que es a quien más afectará, porque las de AMD se hace muchísimo mejor desde los propios controladores Radeon. Es un apartado en el que NVIDIA debería tomar parte. El desarrollador se ha quedado sin acceso tanto a la contraprestación económica de MSI como a las nuevas tarjetas que produce la compañía.

La utilidad de Rivatuner Server Statistics sigue funcionando correctamente, por lo que por ese lado no parece que haya que preocuparse. Es muy usado para mostrar en vídeos los datos en tiempo real de funcionamiento de las tarjetas gráficas, por lo que eso sí sería una hecatombe. No estaría mal que añadiera compatibilidad con las Arc, aunque sea por ahora un grupo minoritario.

Vía: Videocardz.