Las compañías tecnológicas están revisando sus cadenas de producción para reducir al mínimo su impacto en el medioambiente. Es algo que algunas como Apple están a punto de llevar a cero, pero otras tienen mucho trabajo por delante. Mientras tanto, la Unión Europea y algunos países están revisando las normas sobre residuos electrónicos lo que obliga a que aumente la vida útil de la electrónica. Dell apuesta por eso mismo con el concepto Luna, un portátil modular y reutilizable, fácil de desmontar y de actualizar.
Hay varias compañías que ya ofrecen portátiles similares a este, como Framework, por lo que en realidad lo que intenta hacer Dell es llevar esos diseños modulares y de fácil actualización al público general. La compañía también alega que emplea en este equipo materiales reciclados, como aluminio o plástico, procedente por ejemplo de discos duros, pero eso es algo en lo que Apple le saca muchísima ventaja porque también lo aplica hoy en día hasta a las tierras raras —lo cual en realidad le permite reducir mucho los costes, pero eso es otra historia—.
Todo en Luna es intercambiable en caso de avería o actualización, desde la pantalla hasta el teclado, lo cual permite que la mayor parte del equipo no termine en la basura. No ha indicado planes específicos de reciclaje para los componentes viejos de Luna, que me parece mucho más importante en realidad que los planes de querer venderte módulos para actualización del equipo. Estiman que con el sistema de Luna se puede reducir un cincuenta por ciento al huella de carbono frente a producir el mismo portátil sin este diseño modular.
Esa reducción parte de optimizaciones en el diseño y fabricación, como por ejemplo la placa base, que ocupa un 75 % menos y el número de componentes utilizados. También pensando mejor dónde colocar los componentes, como por ejemplo poner esa placa base de menor tamaño más cerca de la cubierta para optimizar el paso de aire por ella, reduciendo a su vez el consumo —la temperatura es un enemigo del consumo en la electrónica; a más temperatura mayor resistencia y más pérdidas por calor, lo cual lleva a los sistemas a consumir más—. La eliminación de gran parte de la tornillería lleva a que se tarde un suspiro en desmontarlo y que las reparaciones lleven mucho menos tiempo.
Fuente: Dell.
