La coyuntura económica que se está viviendo ha hecho que los ciudadanos guarden las carteras y hayan prescindido de lo más fácil: la electrónica. En el primer año de pandemia de covid-19 las ventas se dispararon y la gente ya tiene equipos nuevos y pocas ganas de comprar nada más. Prefiere gastas el dinero de vacaciones. Eso va a jugar en favor del consumidor porque van a seguir bajando los precios de la electrónica, y eso hace que las compras de componentes como los de NAND 3D estén siendo menores de lo esperado.

A pesar de los problemas de contaminación en las fábricas de Kioxia y Western Digital que ha llevado a un recorte de la oferta, la demanda de NAND 3D está siendo tan baja que el precio de las obleas en el tercer trimestre va a bajar hasta un 10 %. Hay algunos problemas actuales para aquellos fabricantes con fábricas en China, como es el caso de Samsung. Eso sí, la traducción a los precios de las SSD será en el cuarto trimestre, porque se espera que en el tercer se mantengan o suban ligeramente hasta un 5 %.

Los confinamientos duros decretados por el Gobierno de Pekín va a afectar a la surcoreana, y para evitar males mayores está aumentando la producción de su fábrica P2L en Corea del Sur. En una situación normal las fábricas de chips están produciendo generalmente a un 80-90 % de su capacidad, y solo en situaciones excepcionales están funcionando al cien por cien. Los motivos son los mismos que en cualquier otro campo: máquinas en mantenimiento, ajustes a la cadena de producción, entre otros. Samsung puede subir la producción de sus fábricas de Corea del Sur porque la demanda de NAND 3D ha estado cayendo en los últimos meses, alejándose de operar al cien por cien.

Otras compañías como YMTC expandirán su producción en al segunda mitad del año, augurando nuevas bajadas de precios si la demanda del consumidor no aumenta, y no parece que con la inflación galopante que hay vaya a ocurrir hasta el próximo año.

Vía: TechPowerUp.