Muchísimas compañías tecnológicas están en la diana de los movimiento pro derecho a reparar, que en la Unión Europea tiene una cobertura legal mayor de la que tiene en EUA y otros países americanos. Sobre todo porque en la UE se están dando pasos para reducir sustancialmente los residuos electrónicos. En el último par de años ha habido crecientes presiones por los gobiernos de medio mundo por conseguir que las empresas faciliten las autorreparaciones por parte de los consumidores, y sobre todo se han centrado en Apple, la cual ha hecho un gran anuncio para evitar problemas futuros.

A través de Jeff Williams, el jefe de operaciones de Apple, se ha anunciado que a partir de 2022 se proporcionarán a los propietarios de un iPhone 12 o iPhone 13 las herramientas y piezas para que hagan ellos mismos las reparaciones de sus productos dañados. Estos incluirá inicialmente la pantalla, batería y cámara, y posteriormente se expandirá a más piezas. También tiene intención de que cubra este servicio lo antes posible a los Mac con chips M1. Lo que no parece es que los productos más viejos vayan a poder ser reparados en casa.

Apple ha denominado a esto como «reparaciones de autoservicios», y estará inicialmente disponible en EUA. Posteriormente se irá ampliando a otros países. Será una tienda específica para las autorreparaciones, con más de doscientas piezas y herramientas para practicarlas. Una gran parte de los compradores de un producto de Apple, por no decir la mayoría, seguirán optando por el servicio de reparaciones de Apple o un tercero porque son reparaciones que precisarán de cierto nivel de conocimientos técnicos.

No lo especifica, pero por ejemplo el cambio de pantalla precisa de instalar una herramienta para volver a sincronizar el Face ID, por lo que estas reparaciones de autoservicio no están pensadas para alguien que no haya usado en la vida un destornillador. Tranquilos, geektopistas, ya os contactará vuestro padre o tío para que les arregléis su iPhone.

Es obvio que los gobiernos estaban presionando en esta dirección, y parece que Apple ha optado por adelantarse a ellos con un cierto aperturismo que huele a hacer aún más caja a base de los usuarios finales. Puede que te parezca caro un cambio de batería de un iPhone por 200 euros, pero si son 100 y te ahorras ir a la tienda y quedarte una temporada sin iPhone, incentivará esas compras compulsivas. También es una forma de descongestionar el servicio técnico de Apple y ahorrarse costes en personal. Ahora solo falta que el resto de compañías sigan el camino abierto por Apple.

Vía: 9to5Mac.