Imagino que no pillo de nuevas a ningún lector de la web ni a nadie habitual en el mundillo de la tecnología con eso de que los precios de ciertos componentes están por las nubes. La causa son diversos factores que ahora no voy a enumerar ahora pero que han hecho que comprarse una tarjeta gráfica sea algo solo reservado a los más pudientes. Y esto es algo que podría saltar al almacenamiento, cuyo precio también fluctúa bastante de forma habitual, debido a una nueva criptomoneda que está ganando fuerza en el mercado.

Chia está desarrollada por Bram Cohen, creador de BitTorrent, y se trata de una criptomoneda que funciona asignando espacio no utilizado en el almacenamiento de una forma que según su creador es capaz de consumir muchos menos recursos que otras criptomonedas de minado tradicional. Tal es su compromiso con el medioambiente que Chia no se mina sino que se «cultiva» como si de una planta se tratara. Esto se debe al menor consumo energético, tanto por parte del propio proceso de «cultivado» como por el menor consumo energético en general que tiene el almacenamiento respecto a las GPU usadas tradicionalmente. Pero como con todo, la avaricia rompe el saco.

Chia es una moneda relativamente nueva, de fácil minado y cuyo «material» de minado es ahora relativamente barato, lo que ha provocado que las hordas de mineros chinos se lancen a la compra masiva de discos duros de entre 4 y 18 TB y discos de estado sólido de 1 y 2 TB, haciendo que los precios se encarezcan hasta un 300 %, pasando de los 200 hasta los 600 dólares en Hong-Kong, llegando en algunos casos a agotar existencias. Tal es la fiebre que fabricantes como Jiahe Jinwei, cuarto productor nacional de China de almacenamiento, está desarrollando ya SSD con el minado como propósito principal.

Vía: Techspot.