Thermaltake ha introducido una nueva serie de fuentes de alimentación, relativamente económica que aporta iluminación RGB. La serie Smart BX1 RGB es una serie que incluye modelos de 550 W, 650 W y 750 W, y tienen un certificado 80 PLUS Bronce.

Las protecciones se limitan a proteger frente a sobrecargas (OPP), sobretensión (OVP), y cortocircuitos (SCP). La serie Smart Pro RGB de la propia Thermaltake es mejor en varios aspectos, y es más recomendable para los que busquen mayor fiabilidad. Tienen un único conector EPS de 4+4 pines y dos PCIe de 6+2 pines, salvo el modelo de 750 W que tiene cuatro. Los cables son planos.

El sistema de iluminación RGB direccionable (ARGB) permite asignar colores independientes a cada uno de los diez ledes situados en el ventilador de 120 mm usado para refrigeración. Tiene siete opciones de color seleccionables a través de un botón en la parte posterior de la fuente. El ventilador hace un ruido en torno a los 23 dB hasta el 50-60 % de carga, y a partir de ahí sube continuamente hasta unos 39 dB.

Thermaltake da cinco años de garantía. El modelo de 550 W cuesta 66 euros, el de 650 euros son 71 euros, y el de 750 W son 91 euros.

Vía: TechPowerUp.