ASUS presentó hace unos meses un portátil para juegos más delgado y ligero de lo habitual, manteniendo una gran potencia en su interior. El Zephyrus M (GM501) es un equipo con un tamaño de 384 × 262 × 19.9 mm y un peso de 2.45 kg, que incluye una GTX 1060 de 6 GB o una GTX 1070 de 8 GB, acompañado de un procesador Core i7-8750H. Finalmente se empieza a distribuir en España, por un precio de 2399 euros, si bien no se espera que llegue a tiendas hasta finales de mes.

Ese modelo incluye 16 GB de DDR4 a 2667 MHz y la GTX 1070 con 512 GB de SSD de tipo PCIe 3.0 ×4. La pantalla es de 15.6 pulgadas de tipo IPS de 3 ms de tiempo de respuesta y refresco de 144 Hz con G-SYNC. También incluye un disco duro híbrido de 1 TB, que es un FireCuda de Seagate.

El sistema de refrigeración del portátil, llamado sistema aerodinámico activo, crea según ASUS un 32 % más de flujo de aire, posibilitado también por una mejora del diseño del equipo, haciendo hueco a un 20 % más de espacio para la circulación del aire. También incluye un sistema antipolvo, y se centra en dos ventiladores para la CPU y GPU de pequeño tamaño.

Dispone de cuatro USB 3.1, un Thunderbolt 3 —conector USB tipo C—, un HDMI y un conector de 3.5 mm de cuatro polos. Dispone de wifi 802.11 ac, Bluetooth 5.0, y batería de 55 Wh. El teclado se ha movido, respecto al Zephyrus, a donde están en todos los portátiles, y que es un aspecto bastante criticado de él. Cuenta con teclas con 1.7 mm de recorrido, y cuenta con retroiluminación RGB y sistema anti toques fantasma.