Xiaomi presentó hace unos meses el Mi Game Book, un buen equipo para jugar con un Core i7-7700HQ y hasta una GTX 1060, manteniendo el diseño en aluminio más típico de Apple. Con la llegada de los procesadores de 8.ª generación, es ahora cuando la compañía ha decidido renovarlo con ellos, lo que implica que ahora se podrá adquirir con un Core i5-8300H o un Core i7-8750H, y la memoria se actualiza de 2400 MHz a los 2667 MHz, pudiendo incluir 8 GB o 16 GB. Por lo demás, el Mi Game Book mantiene las mismas características.

El diseño del portátil es en aluminio, con un tamaño de 364 × 265.2 × 20.9 mm y un peso de 2.7 kg. El sistema de refrigeración es de doble ventilador con un diseño para maximizar la expulsión de calor —lo que dicen siempre todos los fabricantes en este tipo de equipos—. La pantalla es de 15.6 pulgadas con resolución de 1920 × 1080 píxeles, que parece más bien la habitual que se encuentra en estos equipos, con un brillo máximo de 300 nits, y cubre un 72 % del espacio de color NTSC.

Dispone de un teclado con retroiluminación, aunque es básica ya que se distribuye en cuatro zonas, incluida una columna de teclas especiales para activar los ventiladores y otros atajos en la parte de la izquierda, las cuales son programables. Su distancia de viaje es de 1.8 mm, y dispone de seguidilla de 30 teclas. En cuanto a los conectores, dispone de tres USB 3.0, un USB 3.1 tipo C —compatible con datos y vídeo DisplayPort 1.2—, un HDMI 2.0, dos conectores de 3.5 mm de tres polos para micro y auriculares, y un Ethernet. También incluye wifi 802.11 ac, Bluetooth 4.1, una batería de 55 Wh, y lector de tarjetas SD.

El precio del equipo con un Core i5, 8 GB de RAM, 256 GB de SSD y la GTX 1060 es de 7999 yuanes —unos 1000 euros sin impuestos—, mientras que con 16 GB de RAM y el Core i7 es de 8999 yuanes —unos 1150 euros sin impuestos—. Las versiones con la GTX 1050 Ti parte de los 6699 yuanes, o unos 845 euros sin impuestos.