Como fabricante exclusivo de tarjetas gráficas de GPU de AMD, Sapphire es de las pocas compañías que están poniendo en volumen los modelos de RX Vega —aunque se agoten en distribuidora y al final tampoco lleguen a las tiendas—. Ahora ha puesto a la venta un nuevo modelo basado en el chip Vega 10 que conforma la RX Vega 56, y es de la serie Pulse.

Esta Radeon RX Vega 56 Pulse 8G dispone de un diseño externo de buen tamaño, ya que mide 282 × 125 × 50 mm y por tanto ocupa 2.5 ranuras PCIe. Aunque la placa base de la tarjeta es corta, el resto del espacio está ocupado por un grueso disipador de aluminio para permitir manejar las temperaturas que se alcanzan al exprimir los chips Vega, así como permitir que se use más tiempo su frecuencia turbo máxima. Dispone de una placa trasera de refuerzo con un diseño de la serie Pulse, en negro, gris y rojo.

La alimentación corre a cargo de dos conectores PCIe de ocho pines, aunque Sapphire indica que tiene un consumo de 180 W y se recomienda una fuente de alimentación de 750 W. La GPU tiene una frecuencia base de 1208 MHz y un turbo de 1512 MHz, frente a los 1156 MHz y 1471 MHz del modelo de referencia. Mantiene los 8 GB de memoria HBM2 a 1.6 GHz. Incluye tres conectores DisplayPort 1.4 y un HDMI 2.0b.

Estará disponible a partir del 12 de febrero, aunque como no creo que llegue a tiendas no hace falta ni que le pongan precio. Y si llega, rondará los 700 a 750 euros para los criptomineros que tiren su dinero en ella.

Vía: Guru3D.