La principal fuente de ingresos de YouTube es la publicidad. La mayor parte del tiempo que se pasa en esta web se encuentran anuncios publicitarios que se pueden saltar a los cinco segundos, pero hay otros en los que esta característica no está disponible, por lo que el usuario tiene que ver un anuncio de 30 segundos, aunque sea de algo que no te interesa.

La compañía se ha replanteado estos vídeos de 30 segundos que no se pueden evitar, precisamente debido a que el público no esta muy contentos con ellos. Algo que es especialmente molesto para quienes están viendo un vídeo desde su teléfono móvil sujeto a un plan de datos. Por ello, estos dejarán de emplearse a partir de 2018.

Para sustituirlos desde Google harán que se empleen otros formatos de anuncios, como los vídeos publicitarios de seis segundos, los cuales tampoco se podrán evitar. Esto no complacerá a todos los usuarios, pero es un progreso hacia unos anuncios menos intrusivos.

Vía: Ars Technica.