El ejército de los EE. UU. lleva unos años haciendo pruebas para crear armamento basado en cañones láser. No en el sentido de Star Wars, sino como contramedidas para destruir misiles o drones en vuelo, como por ejemplo este proyecto de la Armada, con pruebas anteriores en 2014. Pero la Fuerza Aérea (USAF) del país también quiere añadirlos a sus aviones.
Las ventajas de usar cañones como contramedidas para destruir misiles en vuelo es que el coste de cada disparo es de apenas 1 dólar, frente a los miles que puede costar armar las contramedidas de un avión de combate. El proyecto se llama HELLADS, perteneciente a DARPA, y va a iniciar su fase de pruebas en tierra en Nuevo México, tratándose de un sistema de más de 150 kW de potencia. Las pruebas se centrarán en comprobar si es capaz de seguir y destruir en vuelo cohetes, fuego de mortero, vehículos y misiles tierra-aire.
La intención del USAF es que los aviones incluyan este tipo de cañones láser en 2020, junto con otro tipo de equipamiento para la ciberguerra. Por ejemplo, añadiendo equipamiento que pueda evitar que funcionen correctamente los aviones de los enemigos y puedan despegar. La división encargada de esto es la Ciberfuerza Aérea (Air Force Cyber), para añadir una componente más a la guerra electrónica y hacer de los aviones elementos de combate no solamente explosivos y cinéticos.
Vía: Ars Technica.
