El futuro de OpenGL es bastante incierto, aunque en ningún caso va a dejar de estar entre nosotros. Es inicierto por que los estudios de videojuegos están más interesadas en las ventajas que proporcionan la nueva generación de drivers gráficos como Mantle (AMD), DirectX 12 (Microsoft) o Metal (Apple).

Pero mientras que se consigue llegar a un acuerdo y desarrollar una nueva generación de drivers open source multiplataforma que sustituya a OpenGL y de mayor control a los estudios, habrá que contentarse con las OpenGL 4.5. La gran novedad que trae es Direct State Access (DSA), que permite gestionar las propiedades de diversos objetos (como texturas) sin tener que manejarlos directamente.

Además estas OpenGL 4.5 dan una mayor libertad sobre cómo se envían los comandos al hardware para mejorar la eficiencia multihilo, y la versión SPIR 2.0 que permite usar los núcleos de las tarjetas gráficas para computación (similar a CUDA) creando las aplicaciones en cualquier lenguaje. Por supuesot, OpenGL 4.5 contiene mejoras de rendimiento y fiabilidad en la ejecución de las aplicaciones que hagan uso de esta librería gráfica.

Vía: Ars Technica.