Alemania está siendo el campo de batalla en la guerra de patentes entre Apple y las demás empresas tecnológicas (mayoritariamente Motorola Mobility, ahora propiedad de Google). A partir de ahora, los terminales de Motorola no podrán utilizar la función "desplazar para desbloquear", integrada en un buen número de sus terminales.

De hacer efectiva esta victoria judicial, Apple podría bloquear las ventas de Motorola en Alemania, de forma similar a lo que Motorola consiguió con los iPhones hace unas semanas. La decisión del tribunal puede ser apelada.

¿Estamos cansados de estas demandas de violación de patentes? Pues un poco. Esta semana, sin ir más lejos, Apple también ha ganado en Hong Kong la demanda contra la empresa que le vendió los derechos para usar el nombre de iPad en China y varios otros países en los que lo tenía registrado.

Podemos ver esta guerra desde dos puntos de vista:

  • Que Steve Jobs, abiertamente, quería hacer la guerra por la gente que copiaba el trabajo que hacía Apple en innovación de nuevas tecnologías.
  • Que Apple ha perdido en norte y quiere cada vez más dinero.

Lo que está claro es que Apple patenta gran cantidad de ideas al año, no sólo de electrónica (también de creación de cristaleras, que usa en sus Apple Store, sin ir más lejos). Si las unimos a las que patentan las demás empresas, es casi imposible sacar un producto que no infrinja alguna patente.

Está claro que quizás el sector de las patentes, tanto en Europa como en Estados Unidos, necesiten revisarse para que no estemos todo el día dando noticias de este tipo.