Disney es una enorme multinacional del entretenimiento, que en los últimos años ha tenido que cambiar rápidamente su modelo de venta de contenidos debido a la presión de Netflix. De ahí surgió, no hace mucho, Disney+, un nuevo servicio de vídeo bajo demanda que lleva en funcionamiento desde el año pasado en EE. UU. y otros países anglosajones. Ahora aterriza en España y otros países de Europa, poniendo a disposición del televidente una buena cantidad de contenido.

El precio del servicio, por el momento, es de 6.99 euros al mes o de 69.99 euros al año. Tiene ya aplicaciones disponibles para iOS, Android, tvOS, Android TV, Fire OS, Xbox One, Roku, versión web, y para otras plataformas como televisores inteligentes, por lo que la compañía quiere llegar a la mayor cantidad de dispositivos posibles.

Otros países desde los que se puede acceder a Disney Plus en Europa desde hoy son Reino Unido, Irlanda, Alemania, Italia, Suiza y Austria. Disney optó por retrasar unos días su llegada a Francia, hasta principios de abril.

Entre el contenido que se puede encontrar está el de las películas y series de Disney desde sus inicios —hay películas como Mi cerebro es electrónico de los sesenta que merece la pena ver por un jovencísimo Kurt Russell— aunque no esté todo, todo ahora mismo, el contenido de la Fox —por si queréis ver de nuevo las treinta temporada de Los Simpson, Pixar, Marvel y National Geographic. No en todos los países habrá el mismo contenido, aunque la compañía lo irá expandiendo.

La oferta de contenido es muy extensa, más lo que vayan generando específico para la plataforma, como El mandaloriano, que es probablemente lo más potable que haya hecho Disney de Star Wars desde que decidiera hacer esa vomitiva tercera trilogía de películas para cines.