La saga de Fast & Furious está dando mucho juego a los estudios Universal, pero sobre todo por la gente que se ha ido implicando en las distintas entregas. Ahora es hora de la primera película derivada centrada en dos de los integrantes de la saga como son Dwayne Johnson (Hobbs) y Jason Stratham (Shaw). De esa combinación sale Fast & Furious: Hobbs & Shaw.

El malo de la película es Idris Elba encarnando a Brixton, un anarquista mejorado cibergenéticamente, lo que lo convierte en las propias palabras de Brixton en el «Superman negro». Va a ser una película para tomársela muy poco en serio, con chistes fáciles, competición de testosterona entre los tres, violencia y armamento de todo tipo.

La película se estrena el 2 de agosto.