Análisis: Razer Kishi v3 Pro review en español

Razer le ha dado una vuelta de tuerca a su mejor mando para móviles con el Kishi v3 Pro, con un cambio de diseño para alinearlo con el Kishi Ultra del año pasado. Pero también cuenta con mejoras de Nexus, su aplicación de gestión. Sigue siendo un modelo en el que se puede poner un móvil Android, iPhone o tableta pequeña entre las dos mitades del mando, pero lo veo claramente mejorado respecto al anterior Kishi v2 Pro, pero también frente al Kishi Ultra.

Videoanálisis

Análisis: Razer Kishi v3 Pro review

Desembalado

El Kishi v3 Pro llega en una caja blanca y verde indicando en su portada que funciona con dispositivos Android, así como los iPhone e iPad Mini de Apple. También se indica que dispone de una aplicación Nexus para gestionarlo. En la contraportada se indican características físicas, como la cantidad de botones que tiene, las palancas TMR que integra —la principal novedad—, o su amplia compatibilidad con fundas de móviles.

Al abrir la caja lo primero que se ve es el mando en una bandeja, en la cual hay un cartón en el que se indica qué gomas usars para poner el dispositivo con el que se vaya a jugar. Por defecto tiene puestas las de iPhone, pero incluye juegos para dispositivos Android y para el iPad Mini. También se ven un par de cabezas de palanca que se pueden usar en lugar de las prefijadas. Debajo de la bandeja simplemente hay un manual de usuario.

Este mando para dispositivos móviles tiene un diseño mejorado frente al Kishi v2 Pro —y en la línea del Kishi Ultra pero sin el ARGB—. Se nota al instante principalmente en las agarraderas del mando, o en el diseño de la cruceta. El Kishi v3 Pro está hecho en negro, y al menos da una gran sensación de calidad de fabricación, aunque eso se presupone teniendo en cuenta que su PVPR es de 170 euros.

Este mando mide plegado 244.8 mm × 110.8 mm × 64.3 mm, así que no es precisamente pequeño. Pesa 268 g, y por ese lado no le veo problemas, aunque añadiendo el peso del móvil hará que haya que tener los brazos apoyados para jugar. Siendo un mando para móviles con ambas partes unidas, totalmente extendido mide 334.8 cm, por lo que se puede encajar un dispositivo de unos 17 cm o menos para no forzarlo. Deberían entrar tabletas de 8 pulgadas, por ejemplo.

La disposición de las palancas es asimétrica, a lo Xbox, siendo estas de tipo TMR (magnetorresistencia por efecto túnel), que es una versión avanzada de las magnéticas —o de efecto Hall—. Las TMR no hacen contacto físico por lo que no hay desgaste y por tanto tampoco problemas de deriva, pero frente a las de efecto Hall tienen mejor precisión y linealidad en los movimientos.

Son palancas más caras, pero en la práctica la tendencia es que las de efecto Hall se dejen para productos baratos y se usen estas a partir de cierto precio no demasiado alto, con unos 50 euros es suficiente para incluirlas. La latencia en su funcionamiento es también menor, aunque eso no significa que se vaya a notar. También solucionan otros problemas de las de efecto Hall relacionados con su uso.

En la parte izquierda hay una cruceta de ocho direcciones, botones de inicio —que lleva en iOS al Game Center—, un botón para capturas —pantallazos o grabar vídeos—, y otro para opciones. En la parte derecha hay una botonera ABXY, con microinterruptores muy buenos. Tienen una sensación de clic estupenda, y su ruido es bajo frente a otros que ha usado habitualmente Razer en otros de sus mandos, aunque son mecánicos táctiles. También hay un botón de opciones, y otro para ir a la aplicación Nexus o para añadir un juego a esta aplicación si se pulsa cuando se está jugando.

En la parte superior de cada mitad hay el habitual botón de acción (L1-R1), un gatillo (L2-R2) y un pequeño botón adicional (L4-R4). Mientras, en la parte posterior tienen una leva (M1-M2). Si un juego deja reconfigurar los mandos, que normalmente (casi) todos los más jugados lo permiten, se podría asignar acciones que normalmente precisan de un combo de teclas para simplificar su activación. Ni qué decir tiene que las palancas también tienen clic, que es un poco más duro de activar de a lo que estoy acostumbrado. La sensación de los clics de la cruceta y el ruido que hacen es prácticamente igual a los de la botonera.

Uso

Lo he usado con un iPhone 16 Pro con una funda puesta que puede añadir un par de milímetros, por lo que las gomas preinstaladas las he quitado para que encajara sin problema. A la derecha de la parte interna hay una toma USB-C que es la necesaria para alimentar el mando. El Kishi v3 Pro tiene a su vez tiene una toma USB-C en la parte derecha, y una toma de audio de 3.5 mm. La toma USB-C puede alimentar al teléfono si proporciona más de 15 W. O sea, que no esté alimentado expresamente por un puerto USB de un PC, ni siquiera un Thunderbolt 4 de 15 W. He tenido que usar un cargador de 35 W para que el móvil se recargara mientras jugaba.

El mando tiene una ergonomía bastante buena. Con la excusa de analizar el mando estuve en una sesión de juego de tres horas con algún mínimo descanso, y en todo ese rato no me molestó usarlo, lo cual es muy positivo y dice bastante del diseño que tiene. Las agarraderas tienen una texturización para favorecer el agarre, sobre todo de cara al verano, aunque personalmente las prefiero lisas porque tienen tendencia a llenarse de suciedad cuando pasan los meses y meses de uso. Pero esa es una preocupación a futuro, y según el nivel de uso que se le dé.

No soy de jugar en el móvil sin mando porque, bueno, es la peor forma de jugar a cualquier cosa. Este tipo de mandos en los que se pone el móvil en medio me parecen la mejor solución para jugar con el móvil, y durante el verano es una forma de pasar los ratos vagueando en la playa entre chapuzones. Lo que sería necesario para el Kishi v3 Pro sería una funda de transporte, pero como ocurre con las del Kishi v2 Pro, hay de todo tipo entre los 5 euros y los 20 euros. No es un gran coste adicional, pero sí que es uno bastante necesario para sacar el Kishi v3 Pro de casa.

Al que más puedo jugar es a Diablo Immortal, y tampoco es que lo juegue mucho. Otros títulos me parecen merecedores de ser jugados, como The Last Campfire, y otras aventuras disponibles en Apple Arcade. Bastion es un clásico que no lo he llegado a jugar hasta ahora, pero nunca es tarde para ello y no ha envejecido mal. Hay en juegos en los que la integración con este y otros mandos, de Razer u otras compañías, está mejor o peor hecho. Diablo Immortal es de los juegos que mejor lo implementan, y Fortnite o PUBG también, juegos con los que el mando es plenamente compatible.

En juegos más potentes para iPhone, como Death Stranding, la adaptación a juego con mando es máxima debido a su origen de los últimos compases de la PlayStation 4. Es una gran forma de jugarlos, aunque como diré más abajo, la aplicación compañeta permite retransmitir juegos desde PC, y este mando funciona a la perfección.

El mando dispone de la háptica Sensa HD, que en este caso no está disponible en iOS. Funciona como un mando normal si se conecta a Windows o macOS, y de hecho en macOS muestra perfectamente todos los botones que incluye el mando. Entiende también el botón de captura, y el botón de inicio muestra una pantalla con los juegos instalados. En Windows funciona también la háptica Sensa HD.

Nexus

Como he comentado, este mando es totalmente compatible con Windows y macOS, sistemas operativos que reconocen y funcionan bien con todos los botones que incluye, y eso significa que además de jugar los títulos de iOS o Android permite jugar a los de Windows o macOS a través de retransmisión. Para simplificar todo lo relacionado con jugar con el mando, Razer ofrece Nexus, una aplicación para iOS y Android que funciona como un centro de juegos.

Desde esta aplicación se puede configurar el mando, pero también es un portal en el que Razer facilita encontrar e instalar juegos y aplicaciones de retransmisión como Steam Link. De hecho esta última funciona perfectamente en el iPhone y retransmitiendo desde un Mac, y los juegos adaptados para mando funcionarán a la perfección, con las asignaciones oportunas preestablecidas para todos los botones, incluidas las levas o el tercer botón de la parte superior.

Lo he usado para jugar por ejemplo a Warhammer 40K: Rogue Trader, que no lo había jugado nunca con mando pero que he visto que está perfectamente adaptado. Aunque claro, el juego está disponible para PlayStation y consolas Xbox —que ahora Microsoft llama Xbox hasta a un televisor—, así que tenía todas las cartas para estar bien adaptado para mando. Otros juegos serán un poco más complicado de jugar con él.

Algunas opciones que tiene Nexus tienen que ver con la retransmisión directa de partidas a Facebook Live o YouTube, el servicio PC Remote Play de Razer, ajuste del sondeo del mando en iOS, zona muerta o sensibilidad de las palancas, cambiar entre gatillos analógicos (progresivos) o digitales (limitador virtual de punto de actuación), configuración de botones y otros similares. Es una aplicación que no molesta, está bien, y es más útil que las de configuración de mandos similares de otras compañías.

Conclusión

Razer continúa mejorando su mando estrella para móviles con el Kishi v3 Pro, aunque en esta ocasión los cambios están más relacionados con la ergonomía y con la inclusión del sistema háptico Sensa HD. Es un modelo al que realmente no se le pueden poner pegas, aunque por su precio de 170 euros sí se le echan cosas en falta.

Siendo un mando que sirve también en PC, podría haber incluido gatillos con al menos un limitador físico, aunque se puede configurar como analógico (progresivo) o digital (limitador) desde Nexus. Pero más allá de esto, es un mando muy completo para el sector principal al que va dirigida como son los dispositivos móviles.

Las palancas TMR son realmente buenas, precisas, y no darán jamás problemas de deriva. Son hacia donde van los mandos, hasta que inventen una tecnología mejor, pero las palancas TMR mejoran terrenos clave frente a las de efecto Hall, por lo que las palancas tradicionales resistivas tendrán que ir desapareciendo en la mayoría de casos de uso.

La ergonomía es un aspecto muy positivo, ya que tiene un buen agarre y se puede usar durante horas seguidas sin generar cansancio. Los botones están bien posicionados, y contar con al menos un par de levas siempre es útil para muchos juegos. Los botones dan muy buena sensación de clic, y la cruceta es de buena calidad.

El problema de la háptica Sensa HD es que esté disponible para los juegos de Android o Windows, porque en iOS no funciona. Hay más de un centenar de juegos que lo incluyen, pero es una lista que crece muy muy despacio, así que sigue siendo una tecnología minoritaria. Eso sí, juegos como Diablo Immortal son compatibles, y otros populares o recientes, como Dune: Awakening, pero no todos directamente, sino a través de SimHub, por ejemplo. Así que como dije de los Kraken v4 Pro, Sensa HD funciona bien, es una tecnología genial, pero es complicado que los desarrolladores implementen en sus juegos una tecnología para el 0.01 % de los periféricos vendidos sin un incentivo económico por parte de Razer.

Sea como sea, el Kishi v3 Pro es un estupendo mando para móviles pero que también funciona perfectamente en PC. Gran ergonomía, buenas características y un portal de juegos, Nexus, que permite exprimir todo lo que el mando tiene por ofrecer.

Puntuación