Microsoft no ha tenido el éxito esperado con Windows sobre ARM, la última versión que optimiza el funcionamiento de todo tipo de aplicaciones x86 sobre procesadores ARM, incluidos los juegos. Quizás porque los fabricantes de estos equipos con Windows sobre ARM no han sabido venderlos porque al final son igual de caros que uno con el Windows normal, y la mayor ventaja pudiera ser la autonomía. Pero a cambio se pierde mucho rendimiento con los procesadores de Qualcomm. Aun así, Microsoft ha asegurado que el rendimiento es mejor del esperado por los usuarios.
El dato que ha dado es que el 90 % del tiempo de uso de estos equipos con Windows sobre ARM se realiza con aplicaciones nativa de ARM y no con versiones emuladas de x86. En estos último más bien entrarían los juegos. Al menos esto significa que la conversión de programas a ARM es cada vez más sencilla y que las compañías ven un valor en portarlas a ARM. Además, Microsoft ha indicado que los usuarios de estos equipos no ven que ARM sea un problema en la compatibilidad de las aplicaciones.
Vía: TechPowerUp.