Análisis: Creative Sound Blaster GS3 review en español

Las barras de sonido son una alternativa a los habituales altavoces de PC, aunque no sean necesariamente mejores. Pueden aportar un escritorio más recogido, pero las que están orientadas a jugones suelen incluir iluminación más vistosa. Así que la barra de sonido GS3 de Creative es un modelo económico que ofrece eso, vistosidad, con un sonido más que decente con un cierto refuerzo de graves.

Desembalado

La SoundBlaster GS3 llega en una caja negra con la información de potencia y conectividad en su portada, y los contenidos de la caja en su contraportada. Al abrirla por un lado saldrá la barra de sonido envuelta en una bolsa y con dos piezas de cartón para dejarla en su sitio. También se incluye un libreto de instrucciones y un cable negro con conectores USB-C.

No se incluye el cargador por ser pequeña electrónica y venderse en la UE, el cual tendrá que ser de 15 W, o se puede usar un puerto USB del PC que dé esta cantidad. Si entrega menos podría haber limitación de volumen o cortes esporádicos. Un Thunderbolt 4 o USB 4 debería de entregar 15 W, y otros pueden estar adaptados para entregar más de los 7.5 W, pero habrá que comprobarlo.

La barra de sonido tiene un tamaño razonable, de unos 40 cm de largo, con poco fondo, y el frontal está ligeramente inclinado hacia arriba. Este modelo es en color negro, pero se vende también en color blanco. En el frontal está la habitual rejilla, y en la parte trasera está el puerto de graves, lo cual suele beneficiar a las frecuencias medias.

En el lateral derecho hay una rueda de volumen con clic que permite entre otras cosas encender los altavoces. En torno a la rueda hay tres botones: uno para control de la iluminación, otro para activar una tecnología llamada Super Wide, y un tercero para cambiar entre los tres tipos de conexiones del altavoz. Esas conexiones son básicamente Bluetooth, USB-C y auxiliar. En este lado también hay una salida para auriculares. La entrada auxiliar y la toma USB-C están en la parte posterior.

La barra de sonido no tiene aplicación de gestión, que podría echarse en falta para una mayor personalización de la iluminación, pero realmente tampoco es muy necesario. Además del habitual efecto arcoíris, hay otros de luces fijas o que se va moviendo en función del sonido reproducido. La barra de sonido tiene buena calidad de fabricación, y no parece un producto barato.

Características

Sound Blaster GS3 Compact RGB Gaming Soundbar with SuperWide™ Technology

La GS3 es una barra de sonido interesante en el terreno de la conectividad. Se pueden usar por Bluetooth 5.4, una toma de audio de 3.5 mm, o por el USB-C que incluye. En mi caso los he usado principalmente por cable en un Mac Studio, y el puerto Thunderbolt 4 entrega sin problemas los 15 W que necesitan para funcionar si se pusieran a máximo volumen. Si la conexión no les proporciona suficiente potencia, su sonido puede ser peor, con limitación de frecuencias o volumen. No he notado una clara diferencia entre conectarlos a un puerto USB 3.1 y el Thunderbolt 4, aunque el volumen máximo se ha situado en torno al 50 % en macOS.

Esta barra de sonido tiene un tamaño de 73.7 mm × 410 mm × 92.7 mm y pesa en torno a un kilo. Incluye dos transductores de pequeño tamaño con una potencia RMS de 6 W cada uno, aunque con una potencia pico de 12 W RMS con un total de 24 W. Su respuesta en frecuencia es entre los 65 Hz y los 20 000 Hz, y tiene una relación S/R de 80 dB.

La mejor forma de escucharlos es por la conexión USB-C, seguida por la auxiliar aunque he notado un sonido diferente, y finalmente por Bluetooth 5.4 que es como tiene peor calidad de sonido ya que solo integra el códec SBC, y no están afinados para esa conexión, sino para la USB-C. No suenan del todo mal, pero la mejor forma de disfrutarlos es por la USB-C.

Tienen una buena calidad del sonido para su PVPR de 55 euros, aunque su PVP en el momento de escribir esto sea de unos 40 euros. El sonido suena un poco más cerrado frente a los típicos altavoces normales de dos satélites, y eso se puede notar claramente, aunque no sea una situación mala. Suenan un poco más cerrados, pero decentemente. Tienen una tecnología Super Wide que se activa con un botón que amplía la escena, pero es más para juegos o películas, ya que la música la altera mucho.

Se nota un cierto refuerzo de graves por estar dirigidos a jugones, pero suele sentar bien a la mayoría de canciones que escucho, rock y baile. Las frecuencias medias se escuchan bien, aunque les falta un punto de nitidez para escucharse perfectamente la voz. No quiero decir que estén mal las voces. En cuanto a las frecuencias altas, suenan por lo general bien, pero por la parte alta tiene una tendencia a notarse cosas más raras si las canciones se centran más en ellas, quizás con una mínima distorsión.

Para lo que cuestan, en la práctica es que creo que no se le puede poner pegas al sonido. Una vez que empiezas a reproducir música, te acostumbras rápido a cómo suenan. Es una barra de sonido bastante mejor que una de Dell de 50 euros que integra micrófono que uso con el Mac Studio de un monitor de Dell anterior que tenía hasta hace tres años. También ocupa el doble, así que eso lo lleva en la mejora de sonido.

Conclusión

La barra de sonido Sound Blaster GS3 es un modelo muy interesante por los malabares que hace la empresa para ofrecerla a un bajo PVPR de 55 euros, aunque su PVP en el momento de hacer este análisis sea de 40 euros, que es un precio demoledor para lo que aporta. No es la mejor barra de sonido, pero con ese precio ofrece un sonido decente tirando a bueno, triple conectividad, e iluminación ARGB con un funcionamiento sin problemas.

No tiene el mejor sonido del sector de los altavoces para PC, pero suenan bien. Mata los subgraves por debajo de los 60 Hz, como es esperable de este tipo de altavoces cuesten 40 euros o 200 euros, y por tanto canciones como la habitual Blood || Water que uso para probarlos suena rara. El sonido suena un poco cerrado por ser una barra de sonido, pero no demasiado. Los graves suenan un poco reforzados por estar orientados a jugones y queda bien para juegos, las frecuencias medias están bien representadas y las altas están bien pero quizás arrastran algún sonido extraño por la parte más alta.

Los altavoces Pebble X de Creative que analicé hace unas semanas, tienen un sonido bastante mejor pero cuestan el doble, sobre los ochenta a cien euros dependiendo del momento. Así que para costar ahora mismo solo 40 euros, la barra de sonido Sound Blaster GS3 no tiene pegas reales. Se puede conectar por Bluetooth, auxiliar o USB-C, siendo esta última conexión la que ofrece un sonido claramente mejor. Por Bluetooth suenan un poco más raros, pero no quiero decir mal.

El sistema Super Wide puede merecer la pena para juegos, quizás algo para películas, pero para música no sirve. Como he dicho, es una barra de sonido que equilibra bien todos los terrenos, aunque no destaque realmente en ninguno. Lo único que se echa en falta es una aplicación para gestionar la iluminación o una gestión del firmware, pero no es un producto complejo como para que realmente se necesite.

Puntuación