La compañía xMEMS mostró el año pasado su ventilador de solo un milímetro de grosor para refrigerar de una forma más eficiente los chips. Ahora empieza a desarrollar otras soluciones para otros chips de chips, y no solamente procesadores de móviles, poniendo la mirada en las SSD. La solución desarrollada está en la línea de ese grosor, con 9.3 mm × 7.6 mm × 1.13 mm, aunque inicialmente está más pensada para centros de datos que es donde va a ser más importante mantener las mínimas temperaturas de las SSD para maximizar su rendimiento. En los hogares no es habitual poner las SSD a máximo rendimiento durante largos periodos de tiempo.
Esta solución permite manejar en torno a unos 5 W de potencia de diseño térmico, suficiente para reducir las temperaturas de las SSD en torno a un 20 % con una reducción de la resistencia térmica en un 25-30 %. Unido a un disipador, la reducción de temperaturas será bastante elevada. xMEMS está desarrollando soluciones para otros sistemas, como transceptores ópticos.
Vía: Tom's Hardware.
