Microsoft quiere que todos los usuarios estén siempre en la última versión de Windows, pero no es tan fácil de conseguir. La actual versión, Windows 11, no tiene tanto tirón como esperaba la compañía, y eso que han pasado menos de dos años desde que se pusiera a la venta. La forma fácil de que la gente se cambie es bloqueando las actualizaciones de Windows 10, y es lo que ha hecho. La última versión con nuevas características de Windows 10 ha sido la versión 22H2, tras lo cual solo distribuirá durante un tiempo parches de seguridad.

Será el 14 de octubre de 2025 hasta cuando Microsoft supervise la seguridad de Windows 10. Así pues, solo quedan un par de años para los que están todavía en Windows 10 se pasen a Windows 11, sobre todo si realmente les preocupa la seguridad de sus equipos. Esto no es información nueva, pero siempre es bueno recordarlo. Sobre todo porque muchos jugones están siendo reticentes a la hora de actualizar sus equipos a Windows 10, si bien aquellos que tengan un Core de 12.ª o 13.ª generación deberían usarlo para maximizar su rendimiento.

Vía: TechPowerUp.