NVIDIA lleva intentando más de un año comprar la empresa británica Arm a su matriz japonesa Softbank, pero ha sido una lucha que se le había puesto muy cuesta arriba. La operación iba a ser de 66 000 millones de dólares, con un importante beneficio para Softbank la cual intentaba conseguir efectivo con esta operación. Finalmente NVIDIA ha tirado la toalla, anunciando que da por rota la oferta de compra a Softbank.

Esto tendrá un coste de 1250 millones de dólares para NVIDIA, que era la cláusula del contrato de compra relacionado con la no consecución de la compra. NVIDIA ha tenido mucha gente en contra, desde las Cinco Grandes de la tecnología (Alphabet, Amazon, Apple, Meta y Microsoft), hasta los Gobiernos de varios países. Empezando por los de Reino Unido, que veía la compra como un problema de seguridad nacional, y EE. UU.

En su lugar, Softbank una oferta pública inicial (OPI) de la compañía para sacarla a bolsa antes de que finalice marzo de 2023. Cuando se complete será la segunda vez que Arm sale a bolsa ya que lo fue antes de que Softbank la adquiriera en 2016 por 32 000 millones de dólares.

El principal problema que le ha visto todas las tecnológicas a esta compra es que NVIDIA produce chips de arquitectura ARM mientras que la empresa Arm solo se dedica a crear propiedad intelectual y a licenciarla a terceros. Que NVIDIA fuera a la vez desarrollador de la arquitectura ARM y vendedor de chips ARM podría llevar a una situación en la que NVIDIA se guardara lo mejor del desarrollo de la arquitectura para sí misma teniendo además un acceso anticipado, lo cual ciertamente sería bastante anticompetitivo. La arquitectura ARM es tan importante hoy en día que esta situación sería nefasta.

Vía: Ars Techcnica.