MSI va a ser de los primeros en actualizar sus equipos de sobremesa con los últimos procesadores de Intel que, si bien no están ampliamente disponibles, se espera que a partir de mediados de noviembre lo vayan estando. El Infinite X se basa en el diseño del equipo Infinite A, con un tamaño de 488 × 210 × 450 mm (al. × an. × pr.) y pesa en torno a los 15 kg. Incluye dos tapas: una opaca y otra de cristal, y la tarjeta gráfica se pone en vertical encima del compartimento de la fuente de alimentación.

El frontal del equipo incluye iluminación RGB, y el interior tiene iluminación roja. El procesador incluido es un Core i7-8700K con una placa base Z370, 16 GB de RAM de tipo DDR4-2400, y el almacenamiento base son 128 a 512 GB de SSD tipo SATA3, más un disco duro de 2 TB. Dispone de dos bahías de 3.5 pulgadas en su interior, más uno de 2.5 pulgadas y la placa base tiene dos ranuras M.2. La gráfica es una GTX 1080 Ti Armor de la propia compañía.

El ventilador de la CPU también tiene iluminación, así como el ventilador trasero. La caja incluye una fuente de alimentación de 550 W con certificado 80 PLUS bronce. La fuente, el procesador y la tarjeta gráfica se sitúan en compartimentos distintos. Dispone de conectividad wifi 802.11 ac, Bluetooth 4.2, cuatro conectores USB 3.0, dos USB 3.0 tipo C, dos USB 2.0, más un HDMI frontal y las conexiones de vídeo de la gráfica elegida —generalmente un HDMI, tres DisplayPort y un DVI-D—.

Se pone a la venta en algún momento de noviembre.

Vía: TechPowerUp.