En Estados Unidos, la NHTSA (National Highway Traffic Safety Administration), es la agencia encargada de las normas y regulaciones en las carreteras estadounidenses. En el pasado ha considerado que los vehículos autónomos no eran adecuados para la circulación, aunque acaban de cambiar de opinión.

Google remitió a esta agencia la propuesta de un diseño para este tipo de vehículos a finales del año pasado. La respuesta que han dado a Google, en una carta hecha pública esta semana, han indicado que sus inteligencias artificiales pueden ser consideradas conductores:

Si ningún humano puede conducir el vehículo, es más razonable identificar al conductor como lo que quiera (en vez de quienquiera) que lo esté conduciendo. En este caso, una pieza del equipo motor del vehículo, el sistema de autoconducción, es quien conduce el vehículo.

La NHTSC también ha indicado que Google tendría que ver cómo certifica que su sistema autónomo es capaz de cumplir con un estándar desarrollado y diseñado para aplicarse a un vehículo con un conductor humano.

Aunque esta decisión permitirá a Google y las demás compañías que están realizando proyectos de vehículos autónomos, el estado de California ha presentado el borrador de una normativa que les supone un obstáculo, ya que propone que han de contar con volante, pedales y un conductor con permiso de conducción.

Vía: BBC Technology, EnGadget.