Con todas las revelaciones realizadas por Snowden en 2013, una de ellas hacía referencia al sistema de vigilancia PRISM de la NSA. Su objetivo era hacer que todos los servicios de internet permitieran que la NSA recolectara información de todo tipo de los usuarios de servicios como Facebook, Twitter o Gmail, y Facebook estuvo encantado de participar desde el primer momento.

El Tribunal de Justicia de la Unión Europea tenía pendiente dar su opinión sobre el intercambio de información de ciudadanos europeos entre Facebook y la NSA, y el Fiscal Europeo la dará el próximo 23 de septiembre. La decisión que debe tomar está relacionada con el hecho de si es legal o no que una entidad privada comparta información de los ciudadanos europeos con una agencia de inteligencia extranjera. Hay otras demandas en curso de las que tendrá que hablar también, ya que se realizaron de manera independiente.

La opinión de Facebook desde un principio es que se habían visto obligados por imperativo legal a compartir la información con la NSA, y además que la transmisión de información desde Europa es legal de acuerdo con el tratado internacional de Puerto Seguro de libre intercambio de información. Pero si Microsoft empezó a compartir la información en 2007 y Apple en 2012, Facebook y Google lo hicieron en 2009, por lo que tampoco es que optaran por evitarlo de manera activa.

El fondo de la decisión que debe tomar el Fiscal Europeo es si el tratado de Puerto Seguro se tiene que aplicar a todo el intercambio de información, incluido el resultante de un hecho tan grave como lo ha sido la información recolectada por PRISM.