El ejército de los EE. UU. lleva utilizando drones desde hace décadas en misiones de vigilancia, espionaje y bombardeo. Con el avance de la tecnología este tipo de vehículos aéreos no tripulados han ido adquiriendo mayor interés. En su uso por los ciudadanos, se trata de los aviones de aeromodelismo de toda la vida, pero generalmente asociados con los cuadricópteros.

El uso de los drones por parte de la policía tampoco es nada nuevo, aunque las legislaciones suelen limitarlo a uso de vigilancia, y en muchos casos se prohibe expresamente que sean equipados con armamento. Al menos hasta ahora, ya que en Dakota del Norte se ha aprobado el uso de armamento no letal en los drones policiales, conviertiéndose en el primer estado de EE. UU. en estar permitidos.

La propuesta original del republicano Rick Becker hacía referencia a la necesidad de obtener una orden judicial para utilizar un dron para recopilar evidencias de crímenes, a la vez que prohibía el uso de armamento en los drones policiales. Una enmienda del Bruce Burkett, a instancias del grupo de presión Asociación de Agentes de la Ley de Dakota del Norte, añadió una enmienda en la que se permite el uso de armamento no letal.

Las críticas a la aprobación de esta ley hacen referencia al hecho de que incluso el armamento supuestamente no letal como táseres, gas lacrimógeno o balas de goma, han causado muertes. En EE. UU., entre 2001 y 2013, han muerto más de 500 personas por un uso inadecuado o como efecto secundario del armamento antidisturbios. Dakota del Norte permite además volar los drones para pruebas comerciales, hasta una altitud de 370 metros y realizar vuelos nocturnos con ellos.

Vía: TechSpot.