Antes de que comenzara el verano la compañía OnePlus puso a la venta su phablet One. Con una buena relación entre características y precio (269 euros por la versión de 16GB de al macenamiento), la mayor pega que ha tenido es que está disponible sólo en cantidades limitadas mediante un sistema de invitaciones. Para mantener los costes al mínimo y evitar pérdidas, decían.
Sin duda lo habrán conseguido, por que en estos seis meses sólo han vendido 500.000 unidades. Para ser un "hundidor de buques insignia" como llamaba la compañía al One, han hundido muy pocos barcos con unas ventas tan pequeñas. Teniendo en cuenta que el mercado de los teléfonos lleva ya vendidos este año más de 1.000 millones de dispositivos, no representa ni un 0,05% del mercado.
De haber estado más ampliamente disponible seguramente habrían vendido más, pero claro, habría sido muy difícil venderlo sin márgenes de beneficios como están haciendo. No sé qué tipo de chanchullos tendrán para fabricarlo a precio reducido, pero ha creado muchos resquemores entre los usuarios. No es el típico móvil "me lo compro ya", o no para la mayoría de los consumidores que además recelan de las tiendas "chinas" de venta de telefonía.
Vía: Phone Arena.
