La faceta multiplataforma de Microsoft ejemplifica una de las transformaciones más drásticas de una compañía desde que comenzó la revolución de Silicon Valley, y también un claro caso de éxito. La Microsoft de Satya Nadella no tiene problemas en trastear con Linux, llevando su línea de comandos a Windows o usándolo en sus centros de datos, y mucho menos en hacer cosas para otro sistema operativo que es más competencia, macOS.

Dentro de esos pasos que está dando de aperturismo se encuentra la transformación de Windows Defender en Microsoft Defender, y con este nombre llevarlo a macOS X. Este sistema de protección frente a programas maliciosos de todo tipo va a estar disponible en breve en forma de versión de prueba para empresas, que es al sector al que va a estar sobre todo orientado el producto al principio.

MacOS X incluye un cortafuegos y sistema de detección de intrusiones a nivel básico, pero el malware o programas maliciosos no son por lo general un problema para la plataforma. Existen, por supuesto, pero como cualquier otro sistema *nix, con tener una buena higiene a la hora de abrir correos y tener cuidado de las webs que se visitan es suficiente para la mayoría de usuarios.

Pero en el sector empresarial se precisa estar seguro al cien por cien de que se tiene algún programa para detectar intrusiones, y es donde Microsoft entra de lleno con Defender ATP (Advanced Threat Protection). Tener la misma herramienta en Windows y macOS ayudará a mantener una red interna de las empresas más saneada, evitando que los usuarios de Mac puedan propagar malware a los equipos con Windows. Ahora solo queda que Microsoft distribuya la versión para Linux, que no debe de estar lejos.

Vía: Ars Technica.