Uno de los movimientos más curiosos por los que optó Nvidia en la puesta en circulación de las RTX 2070 y RTX 2080 es que dividía cada uno de los chips que las componen en dos. La RTX 2070 tiene los chips TU106-400 y TU106-400A, mientras que la RTX 2080 tiene los chips TU104-400 y TU104-400A. La diferencia entre los que tienen el sufijo -A y los que no es que los -A se pueden enviar desde fábrica con las frecuencias subidas.

Eso se va a acabar en breve ya que Nvidia llevaría produciendo desde hace tiempo un único chip de cada uno, que sería los TU104-410 y TU106-410, que los fabricantes de tarjetas gráficas podrían usar en cualquiera de sus modelos. Esto no es que sean más potentes como vienen diciendo en ciertos titulares, sino que son potencialmente más potentes.

Seguirá habiendo modelos de RTX 2070 y RTX 2080 que funcionen a las frecuencias de referencia y habrá otros cuyos chips estén subidos de fábrica, como ocurre hasta ahora. La diferencia radica en que incluso los modelos que funcionan a las frecuencias de referencia tienen el potencial de permitir mayores frecuencias de funcionamiento comparables a los que llegan subidos de fábrica, pero tiene un inconveniente.

Al igual que Nvidia estaba asegurando que la serie -A tuviera un mínimo de subida adicional, ahora ningún modelo tendrá asegurada esa subida mínima adicional más allá de la indicada por la compañía, por lo que entra en juego la tómbola del silicio. Puede que te toque un chip en una tarjeta gráfica básica que permita más subida que una tarjeta gráfica orientada a overclocking —como las ROG Strix de ASUS—.

Es de suponer que el posible cambio —todavía por confirmar por Nvidia— pueda tener que ver con que al principio tuviera menos existencias de los chips con menor capacidad de subida y que en estos meses ya sean todos los chips mucho más parejos en cuanto a potencia de overclocking.

Vía: WCCFTech.