A finales del año pasado Apple llegó a un acuerdo con la compañía GT Advanced Technologies para que construyera y operara para ellos una planta de fabricación de cristal de zafiro sintético en Arizona. Un año después, GT Advanced Technologies está en proceso de bancarrota, lo que significa que Apple va a tener que buscar rápido un nuevo productor si quiere que en el iPhone 6s se incluya este material.

La compañía GT Advanced quería que el proceso fuera declarado secreto por que si no tendría que pagar a Apple 50 millones de dólares por revelar secretos industriales. El juez que lleva el caso indicó que no veía motivo para ello, y finalmente GT Advanced ha llegado a un acuerdo amostoso con Apple para zanjar la relación comercial que unía a ambas compañías, aportando la información justa de su planta de Arizona para poder cerrarla.

GT Advanced tendrá que devolver a Apple los 439 millones de dólares que ya le había pagado de forma anticipada para operar la planta de crecimiento de zafiro, y mantendrá en secreto el contenido de los documentos firmados entre ambas compañías. La producción de cristal de zafiro necesario para algunos modelos de Apple Watch tendrán que provenir de otras fuentes, y no está claro si no tendrán que retrasar los de Cupertino su lanzamiento debido a ello.

Vía: TechCrunch.