Cada año, Intel renueva su línea de procesadores para mantener la Ley de Moore plenamente vigente. Por mucho que digan que hay limitaciones físicas al tamaño de los transistores que llevan, siempre se desarrolla alguna triquiñuela para hacerlos más pequeños.

Haswell es la generación de procesadores que sucederá a mediados de 2013 a los actuales Ivy Bridge. En esta ocasión, no esperéis un menor calor, sino más bien al contrario. El Core i7-4770 tendrá un TDP de 7 watios más (84W) que su actual contrapartida, el Core i7-3770 (77W), aunque Intel asegura que tendrán menor consumo. Es pronto para hablar de rendimiento, pero el reloj pasa de 3.4GHz a 3.9GHz, y algo se conseguirá con ello (y tiene pinta que va a ser el necesitar disipadores más potentes y ruidosos).

En la tabla adjunta podéis ver los primeros qu ese pondrá a la venta en el segundo trimestre de 2013 (probablemente abril). Siguen siendo aptos para placas base con socket LGA-1150. No me gusta mucho la parte baja de la tabla, ya que el TDP pasa de 35W mínimo en Ivy Bridge a 45W. El TDP (Thermal Design Power) no es que sea una medida del consumo directo, sino más bien una unión de diversos factores y el calor a disipar en pleno funcionamiento sin que se dañe el procesador.

Una de las mayores características de Haswell es que permitirá, estando por ejemplo el ordenador en reposo, consumir 20 veces menos energía que los actuales. Intel asegura que el consumo directo de estos procesadores será menor, así que veríamos incrementada la duración de las baterías de nuestros portátiles considerablemente.