Amazon se está preparando para el lanzamiento de su servicio de provisión de internet a través de satélite. Antes llamado proyecto Kuiper, comercialmente se llama Leo y llegará el 15 de diciembre aunque la cobertura real no la tengo muy clara ahora mismo. La constelación planeada por Amazon es de más de 3000 satélites, de los que se han puesto este año en posición unos 200, así que le queda trabajo por delante. Pero la novedad es que la compañía ya ha anunciado su antena comercial Ultra que permitirá velocidades de hasta 1 Gb/s de bajada, junto al aspecto que tiene.

Este modelo también cuenta con una velocidad de subida de hasta 400 Gb/s, y hay que tener en cuenta lo de «hasta», porque las condiciones meteorológicas importan mucho. De cara a su durabilidad, según Amazon es altamente resistente a las adversidades climatológicas, tanto altas como bajas temperaturas, lluvias y vientos fuertes.

Los satélites están situados en la órbita baja de la Tierra, por lo que la latencia es baja, pero mayor que una conexión de fibra. Se suele queda en 20 ms o algo menos en condiciones favorables. Condiciones especialmente adversas como lluvia densa o nieve pueden producir microcortes y latencias mayores de >40 ms, y con condiciones extremas los cortes están asegurados. Así que no es como para usarlos como conexión principal salvo en sitios de mal acceso a fibra óptica.

Hay planeadas muchas constelaciones de miles de satélites que al final vamos a contaminar aún más los cielos, que de por sí ya es complicado ver las estrellas con tanto satélite y microsatélite, como para añadir decenas de miles más que es lo que está planeado. Otro despropósito más en lugar de tener una sola constelación para todo el mundo.

Vía: Tom's Hardware.